Blogia
UN LUGAR PARA APRENDER FILOSOFÍA

PENSAR DE MODO DIFERENTE

Cuando se toma partido por los desheredados y los pobres ya no hay vuelta atrás. La elección es una y para siempre, se vota y se milita en "el partido" para el resto de la vida porque cuando nos decidimos por fin a mirar de frente a los ojos de la injusticia la magnitud de lo que observamos es tal que ya nunca más quedamos indiferentes y nuestras acciones de cada día se impregnan de ese olor turbio. 

Podemos optar, eso sí, por ignorar lo que se nos ofrece en bandeja de plata cada día a través de los medios de comunicación, sin salir de casa, o se nos ofrece en la calle por la que pasamos todos los días, sin ir mucho más lejos. En el primer caso apagaremos la tele o la radio o cambiaremos de canal o de estación, cerraremos el periódico o pasaremos la página haciendo una exclamación de horror ante las imágenes más hirientes a la vista.

En el segundo caso nos cambiaremos de acera, para evitar al que pide de rodillas invocando algún nombre de dios, o apartaremos la vista de la ventanilla a la que se asoma una cara sucia y una mano que pide. Pero no mirar e ignorar el dolor no hará que se erradique. Justificarnos diciendo, por ejemplo, que ya hay comedores creados por el sistema, no evitará que ese mismo sistema siga produciendo marginados que infringen la ley porque se han visto empujados al borde de los límites que un ser humano puede resistir.

 

0 comentarios